Carlos Montes nace en La Florida y ya a los 15 años era dirigente de su Junta de Vecinos en el paradero 23. Siendo estudiante de Economía de la UC se incorpora al movimiento estudiantil del cual llega a ser dirigente de la FEUC, en los años de la Reforma Universitaria. En 1968 es elegido representante de los alumnos ante el Consejo Superior de la Universidad. Su vocación siempre ligada a cómo los universitarios se comprometían con los problemas sociales del país. Paralelo a ello continúa con su trabajo socio político en La Florida el que no ha dejado hasta el día de hoy. En Tubul, una bella caleta pesquera de Arauco, conoce, en trabajos de verano a su mujer Gloria Cruz con quien tienen 3 hijos: Andres, Javiera y Juanita y 6 nietos.
Para el golpe militar era dirigente nacional del Mapu y es insistentemente buscado por los organismos de seguridad. Durante los años de dictadura trabaja intensamente desde la clandestinidad, organizando la resistencia. En diciembre de 1980 es detenido, permaneciendo un mes desaparecido en manos de la CNI y posteriormente encarcelado en la Carcél Pública. En Octubre de 1981 es condenado a Extrañamiento y expulsado a México donde parte con su familia. En 1985 regresa a Chile y con una gran visión inicia, junto a un equipo, un fuerte trabajo en relación a la democratización de la Juntas de Vecinos, manejadas en esos años por dirigentes designados, cuestionando así la legitimidad de las autoridades Municipales designadas por el gobierno militar.
Fue el encargado de la Campaña del NO en la Región Metropolitana y desde el 90 Diputado por La Florida. En el Parlamento se ha destacado por su seriedad política: estudioso, responsable y comprometido con los temas sociales y hacienda pública. Fue también presidente de la Cámara de Diputados. Seis veces ha sido elegido el mejor diputado por sus pares.
Y para qué hablar de su compromiso con el Distrito. Su trabajo se ha caracterizado por lo formativo y colectivo que ha sido. Existe en La Florida una gran Red de Iniciativa Ciudadana que se ha ido formando y capacitando a través de miles de cursos, seminarios, foros y trabajo socio-político en terreno.
El trabajo es permanente, aquí no se puede decir: “volvió para las elecciones.”
En cuanto a sus posiciones políticas ha sido consistente, consecuente y tenaz en defenderlas. Desde 1993 se opuso en educación al financiamiento compartido y dio una pelea junto a otros 7 diputados. Lo mismo frente a la LEGE la que nunca compartió. Su consecuencia y constancia en los temas relacionados con vivienda social y desarrollo urbano, derechos laborales y reforma tributaria ha sido ejemplar.