Con el voto a favor de todos los integrantes de la Comisión de Hacienda del Senado fue despachado el proyecto de ley de reforma tributaria. El senador Carlos Montes valoró el acuerdo y presentó los puntos donde el PS cree que todavía hay espacio para perfeccionarlo.
Luego de un mes de sesiones de la Comisión de Hacienda y de escuchar a más de 90 expositores, los senadores aprobaron de manera unánime el proyecto de reforma tributaria. Una iniciativa que presentó la presidenta Michelle Bachelet con muchos fundamentos porque, a juicio de Montes, “se necesita crecer y crecer mucho para enfrentar la desigualdad”.
Se lograría el objetivo de recaudar US$8.200 millones (3 puntos del PIB) porque se consigue que las personas de mayores ingresos paguen más y aportar, así, a los nuevos desafíos del país.
Durante la discusión en la Comisión de Hacienda, se presentaron distintas preocupaciones sobre la reforma, algunas que fueron recogidas, como el incentivo al ahorro e inversión, observaciones a la renta presunta y las atribuciones de SII: “Insistimos en la necesidad que SII no sólo tenga facultades generales sino también pueda fiscalizar las cuentas corrientes bancarias, como lo hacen todos los países de la OECD. Chile tiene convenios en esa dirección cuestión que también se abordó en el protocolo”, explicó el parlamentario.
Montes aprovechó la oportunidad para señalar algunas preocupaciones del Partido Socialista en las que va a insistir en el debate en particular.
En primer lugar hay inquietud con lo que va a ocurrir con las utilidades no distribuidas y con los impuestos diferidos de esas utilidades: “Nos preocupa saber en qué se pueden invertir y en qué no se pueden”, indicó. “Quisiéramos que sólo se pudieran invertir en las mismas empresas y nos preocupa cuánto tiempo se podrán diferir o si va a ser indefinido, como hoy”.
Otra de las dudas es saber si las utilidades no distribuidas pueden sacarse fuera del país sin pagar impuestos no pagados: “Un riesgo de este tipo de franquicia”. Así mismo hay inquietud por los retiros en exceso, el tratamiento de las pérdidas, de qué manera se van a consolidar, el tratamiento que se le va a dar a las ganancias de capital de Fondos Mutuos y Fondos de inversión y qué va a pasar con el FUT histórico: “Somos partidarios de que se creen incentivos para que se retiren más rápido”, precisó el Senador.
Algunos parlamentarios, junto al Senador, también manifestaron su preocupación por el exceso de franquicias del sector inmobiliario: “Chile es considerado un paraíso tributario en inversión en suelo porque no tiene impuesto”. En el caso de la vivienda, el protocolo establece una franquicia para vivienda hasta UF 3.200: “Esto es muy alto y debería ser un subsidio directo a los que compran por primera vez una vivienda de UF 2.500. máximo UF 3.000”.
Sin embargo, a juicio de Montes, el problema de fondo es que el sector inmobiliario tiene demasiadas franquicias: “Alrededor de US$1.300 millones anual, esto es más que el presupuesto de para vivienda del SERVIU para todo el país y en IVA a la construcción desde 1993 a la fecha le ha costado al Estado casi US$10.000 millones”.
Cabe destacar que en la Comisión hubo unanimidad en que había que recolectar US$8.200 millones y que el FUT había que terminarlo por sus graves problemas: “Se asumió que el país estaba en un nuevo ciclo político y que se necesitan cambios”. Valoró que la oposición haya tenido una actitud distinta a la de la Cámara de Diputados: “Quedó claro que las reformas estructurales que presentó la Presidenta Bachelet se van a hacer y que tenemos las mayorías para hacerlas”, finalizó.